sábado, 16 de junio de 2007

Por cierto...

... Sobrevolando el blog he dado con un comentario de Pablo y sin corresponder.

Podeis venir a Barnacity cuando querais, por descontado (aunque para empezar, estais arrestados). Otra cosa es que tenga tiempo para vosotros... En concreto hasta el 15 de Julio más o menos no seré persona (ni siquiera los fines de semana, por aquello de estudiar a contrareloj, y tal), y el 21 de madrugada confío en bajar a Valencia...
(tampoco se dé por sentado, conste)

También habrás deducido del anterior que ni Wii ni legión, aunque todo se andará (bueno, lo de la Wii no sé..).

Y en cuanto a las Magic.. No voy a tener que recordarte que yo me quedé en la 4ª edición. Todo lo hecho desde entonces es pura herejía, y vulgar (mierda, ¿acabo de ganarme una docena de enemigos?).

Espero que con esto se despejasen tus dudas.

P.D: si no vivieses en la Luna no serías tú; no pasa nada, te quiero igual, te quiero así.
Un abrazo como un dark ritual + pyrococcus furiosus...

Tomándome un tiempito

No es para menos. Como le decía ayer a Pat, siquiera tengo ya el tiempo de comentaros, apenas leeros…

El oficio y el beneficio van bien. El segundo está claro, si hay ingreso y no gasto (y no hay gasto por no haber tiempo) el numerito verde sólo puede crecer. El primero es una feliz simbiosis entre explotadores de alto nivel y un servidor, que es bastante masoquista. Voy asumiendo funciones – sin dejar atrás las previas – con el único margen de maniobra de hacer el trabajo más rápido (ya estoy en un volumen de horas extra flagrantemente ilegal, en Uganda). Me vuelvo adicto por momentos.

Si hay un respiro me acerco a este o aquel, que hacen tal o cual cosa que no tiene nada que ver, y así va agrandándose el abanico.

Como mi PES ha ido perdiendo, quién sabe; si será un plan preconcebido o una feliz improvisación. Hace un par de semanas me enviaron a una feria en Francia – esa parte de Francia, eso sí, en la que nadie habla más que Castellano –, en un mes a Alemania (o Hungría, que aún no se sabe, tres – cuatro noches). En no tanto tiempo, probablemente a Ginebra, y por más tiempo, y ya sé qué sillón pedir, que me han dicho que el departamento de fletes es un nido de frikis de todas partes del mundo…
CHEATS:ROARKDEFENDS()
CHEATS:KROMARDEFENDS()
CHEATS:EORADEFENDS()

Ahora compruebo que no sólo no me equivoqué de carrera (lo opuesto quedó falsado allá por el 2003), sino tampoco de especialidad. A los 13 me enamoré de cierto capítulo del libro de historia en que la gente, por una fe más poderosa de la que nunca manejó la Iglesia, una fe perfectamente racional, se lanzaba por las ventanas de rascacielos por docenas. Un eje cartesiano y dos líneas cruzadas son oferta y demanda, también algo hermoso, también un universo. La cotización, una prolongación del sentido de la vida, del multiverso fractal, de la elección por el caos o sonrisa mariposa. Como dijo uno de esos maestros de una sola lección, "es como un TAC para un radiólogo, poco a poco no necesitas estudiarla para entenderla, interpretarla". De poco en poco te fundes con la gráfica, y sólo querrías tener mayor margen de maniobra que las coberturas del día para pegarte al monitor, para emocionarte, porque la adrenalina no ha cesado un ápice, al contrario.

En el otro lado de la moneda, estáis vosotros, está Mónica y el resto de la poesía.
Os echo de menos, y no sólo los dados, el poder vivirlo y expresarlo, questo que venís charlando y yo no estos días, sobre el orgullo friki – velado desde los niveles – recuperar la bohemia de entender de cosas tan inútiles que me catapultaron, de comprender mejor el alma humana y sufrir y vivir la vida con vuestras palabras. De los filotes o éste medio inigualable del que no sabré prescindir, aunque lo intente. Del descanso tan cierto e inexpugnable y grande como el cielo que es Benedetti.
Tal vez según termine el máster, el primer curso, llegue el descanso en paz.

El descanso de una compañía que es sonrisa per se y sin condiciones. De algo tan inalterable como es la amistad y que perdí; aquella que era de cierto para lo bueno y para lo malo.

Más en general, podríamos decir que vivimos el síndrome del cambio de ciudad. Los amigos, el tiempo libre, el ubicarse; recomprenderse.
Suerte y no, en este caso, de la vía epistolar.

De nuevo hablando con Pat. Por no ser Apocalipsis, encontrará todo este drama su lugar desplazado. Son unos meses de lucha, de comprensión filantrópica. Habrá que poner paciencia, mucha, buen gusto en el tintero. Y tanto que aprenderemos.



(Este post va dedicado a todos aquellos que no pueden leerme





aunque lo intentan).



Y a todos los que saben que va dedicado a ellos, por aquellas pequeñas cosas que, sin ser chistes informáticos, entienden ellos tan sólo.


[Y también para Ferrán, con un abrazo enorme; que no sé si me lee, o si lo intenta, pero que hoy celebra otro año de incomprensible buen corazón.]